Mathieu DURAND, Jeremy ROBERT
Comentario de la salida de campo del Lunes 07 de setiembre
Organización vecinal para la preparación ante desastre en las quebradas de Chosica
Foto 1: Obras de contención en la
quebrada de San Antonio de Pedregal
1. Autoridades municipales y dirigentes de la 1era zona (la más consolidada):
Este grupo tienen un discurso bien marcado sobre la eficacidad de las obras. Según ellos, las obras protegen la urbanización. Si no esperan eventos como el de 1987, se preparan de manera complementaria ante un desastre en época de lluvia (formación, simulacros, sistema de alerta temprana, etc.) y prohíben la ocupación de las zonas de riesgos definidas. Sin embargo, esas zonas no son materializadas en el campo. Muestran mucha voluntad, y una capacidad a desarrollar proyectos, buscar financiamientos. Puede ser una razón por la cual nos acogieron de esta manera.
2. Dirigente de la 3era zona, (menos consolidadad) foto 2
El tema principal para esta dirigente es el conflicto con la municipalidad (y el dirigente de la zona 1) por el problema de la propiedad de las tierras. Se reivindica de la comunidad campesina de Jicamarca (en la provincia de Huarochirí, distrito de San Antonio de Pedregal) y no reconoce la administración de la municipalidad de Lurigancho Chosica. Las comunidades campesinas tienen derechos de propiedad y de administración de tierras que son distintos e independientes de las jurisdicciones municipales.
En lo que concierne el riesgo relacionado a los huaycos: esta dirigente critica las obras de protección poniendo en evidencia sus rellenos progresivos, y las etapas de levantamiento de esas mismas. Teme que el hecho de subir los diques haga que el huayco salga de su cauce hacia la zona urbanizada. En cuanto a la preparación, no parece tan dinámica como el dirigente de la primera zona y no parece tener ninguna coordinación con ellos, ni con defensa civil.
Foto 2: Dirigente de la etapa 2 (izquierda) y de la etapa 3 (derecha) del A.H. Pedregal
Comentario:
Las obras se están llenando progresivamente (foto1), y trabajadores informales sacan la arena por su propia cuenta. Es conveniente para los pobladores y para la municipalidad pero aparece muy temporal, y traduce la falta de mantenimiento una vez las obras hechas (por falta de presupuesto y/o de voluntad).
Conclusion:
Las obras llaman mucho la atención a primera vista, y existe un discurso sobre la sensación (ilusión) de seguridad que producen.
En término de gestión de riesgo, la municipalidad parece tratar de mantener esta situación haciendo lo básico:
- hemos hecho las obras (y tratemos mantenerlas)
- tratamos de limitar la urbanización, sin ser muy claro donde, ni como, ni proponer alternativas,
- y, preparamos a la población a actuar frente a un desastre.
No parece tener la capacidad de gestionar el desarrollo urbano de esos sectores., entonces deja la población libre de encargarse de su propio desarrollo. Sin embargo, el hecho de que se haya hecho obras de tal magnitud (que parecen sobre dimensionadas) nos llevas a dos preguntas:
¿Existe o no un interés (no evidente) de proteger la carretera central, eje esencial del abastecimiento de Lima en alimentos, combustible, productos mineros etc.; así como elementos esenciales del abastecimiento de agua y de energía, que justifico esas obras?
¿O (y) la manera de aprehender los riesgos hace que solo se imagina medidas estructurales, (que al final son de eficiencia parcial sobre todo si no están mantenidas)?
Si la urbanización no fue afectada desde el 1987, queda sin embargo vulnerable (aumentación de la población, colmatación de los diques, etc.) frente eventos de poca probabilidad pero de gran amplitud. Entonces, ¿Que se hubiera debido hacer para que esa población pudiera tener una oportunidad de desarrollo (de alojarse y de vivir de sus actividades)?
Comentario de la salida de campo del miercoles 09 de setiembre:
Un proyecto urbano para reducir los riesgos en el cerro el Agustino
Un vecino que tiene su casa en la cima del cerro el agustino, se moviliza para mejorar sus condiciones de vida. No lo hace para reducir los riesgos de caida de su casa (foto 4), no lo hace para reducir los riesgos hacia la delincuencia. Su único deseo es tener un pequeño jardín al lado de su casa. Cuando se le pide “para que ete jardín?”. “Para poder descanzar cuando viene el sol. Acostarme acá y aprovechar”.
Foto 4: Jardín y casa encima del cerro El Agustino
Foto 5: Poblador que cuida su jardín